Nunca
juzgues usted mismo duramente. Sea amoroso consigo, cobras cada vez menos a si
mismo. Traiga de vuelta lo entusiasmo de lo niño o de la niña que tu fuistes,
vivindo a cada momento sin pensar en culpas y errores, zambulliendo em su verdad
más profunda. ¿Por qué pensar en los ojos de los demás acerca de su vida? ¿Para
qué preocuparse en seguir las normas impuestas? Su camino en este mundo es sólo
un breve momento. ¿Qué valor tiene el uso de una mordaza, cerrarse em uma jaula
sólo para alcanzar los ideales sociales que no son sus?
Abres
la camisa, sueltas lós pelos, tiras la ropa, ficas pelado y ti lanzas em el mar
de la existencia! Vives leve, olvidas los encargos. Sea quien quieres ser. La
vida pasa mucho deprisa.
Nenhum comentário:
Postar um comentário